lunes, 18 de marzo de 2013

La otra Navidad



(MIÉRCOLES, 9 DE ENERO DE 2013)


Cuando las luces navideñas de mis vecinos "los Alarcia" del portal 4ºA cesan de transmitir color y vida a mi urbanización, ahí es cuando, para mí, acaba eso que conocemos por Navidad. Esa época festiva, alegre, familiar... en la que los sueños de cada adulto están destinados a un décimo de la lotería, mientras que los sueños de los niños y niñas se depositan en la carta que escriben a los Reyes Magos. Esa época en la que caemos en la tentación de comer más de la cuenta. Esa época en la que recibimos un nuevo año lleno de ilusión y propósitos que no tardaremos en incumplir. Esa época en la que amamos al que tenemos al lado, sin motivo alguno, nos sentimos más solidarios y generosos. Eso es tan cierto, como injusto. ¿No creéis? Quiero decir, ¿por qué no amar todos los días del año? ¿por qué no ayudar al de al lado los 365 días?
Estas Navidades, esa cruda realidad me dio una gran bofetada. Me di cuenta de ello al poder ver con mis propios ojos que hay personas que no sienten igual esa Navidad. Viven otra Navidad,  totalmente distinta, a la que tú y yo vivimos. Se encuentran en un segundo plano, opaco para la mayoría.
Gracias al fantástico grupo de jóvenes que están creando la Asociación APUMAK("amigo" en camboyano), en la que tengo la suerte de participar, tuve la oportunidad de conocer otra forma de vivir la Navidad, de verla desde más ángulos de los que acostumbraba en años anteriores. 
Foto: Johny Leo Johansen
Acordamos realizar un "Desayuno Solidario" (así lo llamamos nosotros) por el centro de Madrid. Esta actividad consiste en reunirnos en Sol a las 8 de la mañana, cada uno se encarga de traer una cosa: café caliente, zumo, galletas, leche, bollos... Una vez divididos en grupos, nos separamos y recorremos los aledaños para acercarnos a esas personas desfavorecidas que sobreviven pidiendo en la calle y aportarlas nuestro granito de arena en la satisfacción de sus necesidades. La experiencia fue inolvidable; la naturalidad con la que podías tratar con ellos y lo poco que nos costaba hacer algo como eso era asombroso. Creo que ese día recibí uno de los "gracias" más sinceros de mi vida. El hecho de, como dice Mario, pieza clave en la asociación, "calentar los fríos despertares de la gente que sueña sin un techo encima" fue algo inefable. Estas personas no sólo necesitan ayuda en Navidad, sino a lo largo de todo el año. La injusta realidad es que cada día hay más gente sin techo y más techos sin gente. El puto ser humano, una vez más.
Foto: Johny Leo Johansen
Desde APUMAK tenemos clarísimo que realizaremos "Desayunos Solidarios" con más frecuencia, así que aquel que esté interesado es bienvenido.
Por eso invito a todo el mundo a continuar con el famoso "espíritu navideño" durante todos los días del año. Es algo difícil, pero no imposible. Sólo con poner un poco de nuestra parte sería suficiente. Ya decía algo parecido Eduardo Galeano: "Muchas personas pequeñas, en un lugar pequeño, haciendo cosas pequeñas pueden cambiar el mundo"


Foto: Johny Leo Johansen

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